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DIOS SIEMPRE CONTIGO

 



Solamente servimos y nos comprometemos a servir con alegría, cuando verdaderamente hemos interiorizado en nosotros la Palabra de Dios. En el pobre, en el necesitado, en el hambriento, etc es donde verdaderamente vemos y encontramos el rostro de Jesús, la segunda persona de la Santisima Trinidad. De nada nos sirve decir soy cristiano si no hacemos la caridad con el prójimo, así de sencillo. Recordemos siempre que por las buenas obras que realicemos seremos juzgados en el amor, bendiciones. 






Dios siempre con el que sirve!. Con Él todo es posible. Orden de San Benito







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SOLEMNE CELEBRACIÓN EUCARÍSTICA A LA SANTÍSIMA VIRGEN DE COROMOTO PROCESIÓN Y ÁGAPE FRATERNO 🇻🇪

Solemne celebración eucarística a la Santísima Virgen de Coromoto, procesión y ágape fraterno. La Gloria para Nuestro Dios 🇻🇪 Gracias Stma. Virgen de Coromoto por permitir ésta solemne eucaristía. Que sea para todos nosotros motivo siempre de unidad y gozo en el abrazo de tu hijo amado Ntro. Sr. Jesucristo.  Viva la Virgen de Coromoto !  “¡Tú eres el orgullo de nuestro pueblo! En los numerosos Santuario Marianos que se levantan en tantos lugares de la tierra, repetimos estas palabras del libro de Judit, para expresar nuestra alegría, porque la Madre de Dios ha establecido su morada en medio de su pueblo. Hoy pronuncian estas palabras los habitantes de Venezuela, que precisamente aquí en Coromoto, se unen para venerarla como Patrona de Venezuela». También invitó a los venezolanos a «trabajar por la justicia y la paz para edificar una sociedad más justa y solidaria «.  San Juan Pablo II  ordendesanbenito.org/donations En el rito de conclusión el Santo Padre realizó la siguiente oración

NO OS CANSÉIS DE HACER EL BIEN

Manteneos firmes e inconmovibles en la fe, haciendo siempre progresos en la obra del Señor; sed conscientes de que vuestro trabajo no es vano a los ojos del Señor. No os canséis de hacer el bien. 1Co 15,58; 2Ts 3,13. ordendesanbenito.org/donations

LA MISERICORDIA DIVINA Y LA MISERICORDIA HUMANA

De los sermones de san Cesáreo de Arlés, obispo (Sermón 25,1: CCL 103,111-112) LA MISERICORDIA DIVINA Y LA MISERICORDIA HUMANA Dichosos los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Dulce es el nombre de misericordia; hermanos muy amados; y, si el nombre es tan dulce, ¿cuánto más no lo será la cosa misma? Todos los hombres la desean, más, por desgracia, no todos obran de manera que se hagan dignos de ella; todos desean alcanzar misericordia, pero son pocos los que quieren practicarla. Oh hombre, ¿con qué cara te atreves a pedir, si tú te resistes a dar? Quien desee alcanzar misericordia en el cielo debe él practicarla en éste mundo. Y, por esto, hermanos muy amados, ya que todos deseamos la misericordia, actuemos de manera que ella llegue a ser nuestro abogado en este mundo, para que nos libre después en el futuro. Hay en el cielo una misericordia, a la cual se llega a través de la misericordia terrena. Dice, en efecto, la Escritura: Señor, tu misericordia llega al cielo.